"They Live By Night" (1948) de Nicholas Ray es su ópera prima. Escrita por Ray y Charles Schnee, adaptando la novela Thieves Like Us de Edward Anderson, con la fotografía de George E. Diskant y la música es de Leigh Harline, está protagonizada por Cathy O'Donnell, Farley Granger, Howard Da Silva y Jay C. Flippen. Aunque es el primer largometraje de Ray, es probable que sea una de sus mejores; una película de cine negro deslumbrante y conmovedora. El hermoso y austero trabajo de cámara, el diálogo estólido y las interpretaciones exquisitas resultan en una potente pieza sobre la que el propio Ray dijo que no estaba tratando de hacer una película de cine negro, simplemente estaba contando una trágica historia de amor; quizás por eso la película es tan fascinante.
"The Big Sleep" (1946) de Howard Hawks, con cinematografía de Sidney Hickox,
la músia de Max Steiner, guión de William Faulkner, Leigh Brackett, y Jules
Furthman, basado en una novela de Raymond Chandler, está protagonizada por
Humphrey Bogart, Lauren Bacall, John Ridgely, Martha Vickers, Dorothy Malone
y Peggy Knudsen.
Howard Hawks a creado una obra maestra con una trama compleja, con un guión
famoso por sus diálogos inteligentes y un personaje central interpretado por
Bogart que contribuyó significativamente a crear la mística del actor.
La película sería tremendamente influyente en el movimiento del Film Noir.
"Sugata Sanshirô " (1943) de Akira Kurosawa, es su primer película. Una obra maestra que inspiró
innumerables secuelas e imitaciones que enaltecen a los practicantes de artes marciales y su búsqueda
de la perfección interior y exterior. En 1944, fue censurada por las autoridades japonesas de la época,
llegando cortarse 600 metros de película, que no se han podido recuperar.
Der Golem (1920) de Paul Wegener, es la primera gran película de monstruos de la historia.
Supone un hito en la historia del cine fantástico y, en especial, del subgénero dedicado a la figura del «monstruo» como protagonista.
Es palpable la influencia de la obra de Wegener en otros títulos posteriores, especialmente en «El doctor Frankenstein» (Frankenstein, 1931) de James Whale.
Basada en la novela de Gusta Meyrink, se inspira en la leyenda de El Golem de Praga, vinculada a Judah Loew ben Bezalel, quien ejerció como rabino en Praga a finales del siglo XVI.
En el folklore judío, el Golem es una criatura creada a partir de materiales inertes.
Posiblemente, la mayor diferencia de este filme respecto a otras películas basadas en el mismo tipo de creaciones monstruosas, radique en su peso narrativo, donde cobra mucha presencia
el marco histórico, político y social, y los personajes no están puestos al mero servicio de la acción.
'All Quiet On The Western Front' (1930) de Lewis Milestone, es una de las películas más poderosas
jamás realizadas, fuera de cualquier género o período de tiempo. Y también se encuentra entre
las mejores jamás rodadas. Se realizó 12 años después del final de la primera guerra mundial con
sus masacres bárbaras que precedieron a la historia contemporánea y ganó el Premio de la Academia
a la Mejor Película y Mejor Dirección.
Es una obra maestra y la primera película que hace una declaración política, no pacifista sino
humanista contra la guerra.
"Broken Lullaby" (1932) de Ernst Lubitsch, adaptacion de una obra de teatro de Maurice Rostand,
con guión escrito por Ernest Vajda y Samuel Raphaelson,la fotografia de Victor Milner y las
actuaciones de Lionel Barrymore, Nancy Carroll y Phillips Holmes, es una joya cinematografica,
altamente sofisticada por su trabajo de dirección y fotografía.
Aparecida catorce años después de la primera guerra mundial, es una pintura inquietante y
conmovedora de las secuelas de la guerra, una mirada profundamente introspectiva al dolor, la
conmoción y el arrepentimiento. Aunque eclipsada por la más famosa "All Quiet On The Western
Front", es tambien, una obra maestra con un elocuente mensaje antibélico.
"Les Maudits" (1947) de René Clément, quién también co-escribió el
guión con Victor Alexandrov, Henri Jeanson, Jacques Rémy y
acques Companéez, está protagonizada por Marcel Dalio, Henri
Vidal, Florence Marly, Fosco Giachetti y Paul Bernard.
Entre todas las películas de Clément que tratan sobre la Segunda
Guerra Mundial "Les Maudits" es quizás, la mejor.
Una lección de suspenso claustrofóbico y tensión psicológica,
con un grupo de personajes realmente desagradables, innobles y
sin características redentoras, que resulta fascinante.
"Stagecoach" (1939) de John Ford, basada en el cuento "Stage to Lordsburg" de
Ernest Haycox, adaptado a la pantalla por Dudley Nichols y Ben Hecht, la foto-
grafía de Bert Glennon y la música de Gerard Carbonara, las actuaciones de John
Wayne, Claire Trevor, Andy Devine, John Carradine, Thomas Mitchell y Louise Platt,
es el primer gran western de la historia del cine (para algunos, incluso el mejor).
Es una lección de narrativa cinematográfica, donde la complejidad de los personajes
compite con la acción y el escenario en importancia.
Estableció el estándar para el género elevándolo a clase "A", vinculó para siempre
los paisajes de Monument Valley a la iconografía éste y llevó al estrellato a
John Wayne.
Nominada a siete premios de la Academia, incluidos Mejor Película, Mejor Director,
Mejor Fotografía, Mejor Decoración de Interiores, Mejor Montaje, Mejor Actor de
Reparto(ganado) y Mejor Música (ganado), es una película mítica.
"A Woman's Face" (1941) de George Cukor, protagonizada por Joan Crawford,
en posiblemente el mejor papel de su carrera, es una nueva versión de Hollywood
de la película sueca de 1938 "En Kvinnas Ansikte", sobre una obra escrita por
Francis De Croisset.
Con guión de Donald Ogden Stewart y Elliot Paul, co-protagonizada por Melvyn
Douglas, Conrad Veidt y Osa Massen, es un thriller dramático magistralmente dirigido
por Cukor, con un arrollador protagónico de Crawford, que lo convierten en uno de los
mejores films del director.
Jane Eyre (1943) de Robert Stevenson, basada en la novela de Charlotte Brontë, con un guión co-escrito
por el mismo Stevenson, con John Houseman, Aldous Huxley, Henry Koster y protagonizada por Orson Welles,
Joan Fontaine y Peggy Ann Garner, es realmente la adaptación definitiva de la novela de Brontë.
Hay muchas buenas versiones de esta historia gótica de la lucha entre la mundanalidad y la virtud,
pero esta versión sigue siendo la mejor en general.
Magnífica, es la palabra que se puede aplicar a esta notable película romántica, gótica y fascinante,
que en su conjunto es una obra maestra.