AQUI LA INFORMACIÓN: https://www.expreso.com.pe/opinion/los-73-efectos-adversos-de-la-vacuna-sinopharm/

Nos sorprende la declaración, en varios medios peruanos del conglomerado RPP, del nefasto Dr. Elmer Huerta que animaba a la protesta explicando que “según estudios”, se había demostrado que en las protestas uno no se contagiaba. Sus declaraciones eran rematadas por otra periodista del medio que terminaba la nota con “tips para protestar con seguridad” y animaba a los oyentes a “ejercer su derecho constitucional” en plena emergencia sanitaria. Acaso estos mismos medios no nos venían martillando continuamente, desde hace 8 meses, el concepto de la distancia social como esencial para frenar el contagio y como era un delito romper esta norma sanitaria? Es que la aglomeración en una marcha, llena de empujones y gritos, además de la tos y estornudos generados por los gases lacrimógenos, es menos grave que la que se puede generar en un mercado, en una escuela, en una universidad o en los espacios públicos abiertos? Es increíble como los mismos medios que aplaudían cuando la policía perseguía a un padre y su hijo que entraban al mar para hacer deporte, y eran luego arrestados y fichados como delincuentes, o los que se atrevían a pasear a su perro sin mascarilla y eran perseguidos, ahora se dedican no solo a animar la marcha, sino también a realizar coberturas continuadas de las protestas o a “informar” como se organizarán las futuras marchas y notificar sobre los lugares de concentración. Hoy vimos a estos mismos medios cubrir, de manera extraordinaria y en cadena las protestas, y rasgarse las vestiduras por la primera víctima de estas marchas, cuando ni siquiera les pareció mayor notica la persona muerta por un confuso disparo policial en el momento en que perseguían y reprimían a un grupo de amigos que se juntaban para un partido de fulbito dominical. Este doble rasero, evidente y escandaloso, solo muestra que el término abrupto del gobierno anterior deja en vilo los intereses que tenían pendientes, y este nuevo gobierno (establecido siguiendo los mandatos constitucionales, duela a quien le duela) no piensa seguir con esa agenda. Vemos cómo se van sumando distintos actores a las protestas y se sigue el mismo guión que vimos desplegado en las protestas recientemente en Chile y en EEUU con las movilizaciones de “black lives matters”. Infiltración de violentos vándalos, que solo dejan un rastro de destrucción a comercios y bienes públicos, apoyados por una intensa actividad en redes que anima y justifica la protesta sin mayores razones que la protesta misma. Y cuando la policía se ve forzada a actuar para mantener el orden, la prensa se escandaliza por la “represión policial”. Represión policial que al inicio de la pandemia fue usada para despojar de modestas herramientas de trabajo a los ambulantes desesperados que trataban de llevar dignamente un pan a su casa, y que a estos medios no les llamo mínimamente la atención. Esperemos que los peruanos podamos ver la verdadera lucha de poderes que se está librando en nuestro país: por un lado los intereses globalistas que no quieren perder el control ya largamente establecido y ganado en nuestro país y por otro, la resistencia de un puñado de peruanos valientes que se esfuerzan por recuperar el país. Que los tiempos tan convulsos que vivimos por lo menos sirvan para que se caigan las máscaras y darnos cuenta de quien está de cada lado.