En la segunda temporada de Noragami el foco principal está en Bishamon, diosa de la guerra. Ella tiene muchos Shinki debido a su incapacidad para abandonar espíritus atacados por Ayakashi. Ella tiene un gran grupo de Shinki con ella como líder, causandole problemas como que a veces no puede atender a todos adecuadamente, sobre todo cuando uno de ellos se enferma o tiene dolor. Ella tiene un fuerte odio por Yato, como un oscuro pasado se une a los dos. ¿Cómo los terribles acontecimientos de hace cientos de años en combinación con sucesos malignos actuales afectan a Yato y Yukine?
Yato es un dios menor cuyo sueño es tener una gran cantidad de seguidores que lo adoren y recen plegarias por él. Desafortunadamente, su sueño está lejos de hacerse realidad, ya que no tiene ni siquiera un solo santuario dedicado a él. Para empeorar las cosas, la única socia que tenía para ayudar a resolver los problemas de la gente acaba de renunciar. Su divina suerte sólo podría cambiar cuando se tropieza con Iki Hiyori, quien le salva la vida. Este hecho deja a Hiyori en un buen lío también, por lo que se quedará a su lado hasta que su problema se resuelva. Junto a Hiyori y su nuevo socio Yukine, Yato hará todo lo que pueda para ganar fama, reconocimiento y sólo tal vez, una capilla dedicada a él también.
Yato es un dios menor cuyo sueño es tener una gran cantidad de seguidores que lo adoren y recen plegarias por él. Desafortunadamente, su sueño está lejos de hacerse realidad, ya que no tiene ni siquiera un solo santuario dedicado a él. Para empeorar las cosas, la única socia que tenía para ayudar a resolver los problemas de la gente acaba de renunciar. Su divina suerte sólo podría cambiar cuando se tropieza con Iki Hiyori, quien le salva la vida. Este hecho deja a Hiyori en un buen lío también, por lo que se quedará a su lado hasta que su problema se resuelva. Junto a Hiyori y su nuevo socio Yukine, Yato hará todo lo que pueda para ganar fama, reconocimiento y sólo tal vez, una capilla dedicada a él también.
Yato es un dios menor cuyo sueño es tener una gran cantidad de seguidores que lo adoren y recen plegarias por él. Desafortunadamente, su sueño está lejos de hacerse realidad, ya que no tiene ni siquiera un solo santuario dedicado a él. Para empeorar las cosas, la única socia que tenía para ayudar a resolver los problemas de la gente acaba de renunciar. Su divina suerte sólo podría cambiar cuando se tropieza con Iki Hiyori, quien le salva la vida. Este hecho deja a Hiyori en un buen lío también, por lo que se quedará a su lado hasta que su problema se resuelva. Junto a Hiyori y su nuevo socio Yukine, Yato hará todo lo que pueda para ganar fama, reconocimiento y sólo tal vez, una capilla dedicada a él también.
En la segunda temporada de Noragami el foco principal está en
Bishamon, diosa de la guerra. Ella tiene muchos Shinki debido a su
incapacidad para abandonar espíritus atacados por Ayakashi. Ella
tiene un gran grupo de Shinki con ella como líder, causandole
problemas como que a veces no puede atender a todos adecuadamente,
sobre todo cuando uno de ellos se enferma o tiene dolor. Ella tiene
un fuerte odio por Yato, como un oscuro pasado se une a los dos.
¿Cómo los terribles acontecimientos de hace cientos de años
en combinación con sucesos malignos actuales afectan a Yato y Yukine?
En la segunda temporada de Noragami el foco principal está en
Bishamon, diosa de la guerra. Ella tiene muchos Shinki debido a su
incapacidad para abandonar espíritus atacados por Ayakashi. Ella
tiene un gran grupo de Shinki con ella como líder, causandole
problemas como que a veces no puede atender a todos adecuadamente,
sobre todo cuando uno de ellos se enferma o tiene dolor. Ella tiene
un fuerte odio por Yato, como un oscuro pasado se une a los dos.
¿Cómo los terribles acontecimientos de hace cientos de años
en combinación con sucesos malignos actuales afectan a Yato y Yukine?
Yato es un dios menor cuyo sueño es tener una gran cantidad de seguidores que lo adoren y recen plegarias por él. Desafortunadamente, su sueño está lejos de hacerse realidad, ya que no tiene ni siquiera un solo santuario dedicado a él. Para empeorar las cosas, la única socia que tenía para ayudar a resolver los problemas de la gente acaba de renunciar. Su divina suerte sólo podría cambiar cuando se tropieza con Iki Hiyori, quien le salva la vida. Este hecho deja a Hiyori en un buen lío también, por lo que se quedará a su lado hasta que su problema se resuelva. Junto a Hiyori y su nuevo socio Yukine, Yato hará todo lo que pueda para ganar fama, reconocimiento y sólo tal vez, una capilla dedicada a él también.
Cuando un Dios posee el cuerpo de un humano suele ser para conseguir más creyentes, pero como os imaginaréis, los métodos de Yato son poco ortodoxos y para ese fin hace que Hiyori se comporte como una gamberra y levante pasiones allá donde vaya.
Yato es un dios menor cuyo sueño es tener una gran cantidad de seguidores que lo adoren y recen plegarias por él. Desafortunadamente, su sueño está lejos de hacerse realidad, ya que no tiene ni siquiera un solo santuario dedicado a él. Para empeorar las cosas, la única socia que tenía para ayudar a resolver los problemas de la gente acaba de renunciar. Su divina suerte sólo podría cambiar cuando se tropieza con Iki Hiyori, quien le salva la vida. Este hecho deja a Hiyori en un buen lío también, por lo que se quedará a su lado hasta que su problema se resuelva. Junto a Hiyori y su nuevo socio Yukine, Yato hará todo lo que pueda para ganar fama, reconocimiento y sólo tal vez, una capilla dedicada a él también.