"No somos pecadores porque pecamos, sino pecamos porque somos pecadores". De esto voy a hablar en mi exposición de Romanos 5:15-21 con el título "El milagro de la gracia divina".
Después de haber expuesto lo que Dios hizo por nosotros a lo largo de 11 capítulos, Pablo llega a la conclusión que de nuestra parte solo cabe una respuesta: renunciar a nuestros derechos. Una palabra sinónima es "sacrificio".
Jesucristo tenía una relación especial con los más pequeñoss. En el pasaje que consideramos podemos sacar algunas lecciones muy importantes para nosotros.
Los discípulos admiran la belleza del templo. Jesús les tiene que recordar que este edificio está destinado a la destrucción. Pero este mensaje le salvó la vida a los cristianos de Jerusalén. Veremos por que.