**Ingredientes (4 comensales)** 500 gramos de pasta rellena de espárragos 50-60 gramos de mantequilla de trufa https://odysee.com/@SALSAMAN%C3%8DA:6/salsa-1247:7 100 gramos de agua 4 puntas de espárragos verdes frescos https://odysee.com/@SALSAMAN%C3%8DA:6/salsa-1998:f c/n de sal c/n de pimienta negra recién molida c/n de perlas de guindilla (opcional) c/n de perlas de vinagre balsámico (opcional). **Elaboración** Pon una olla con abundante agua a calentar para cocer la pasta. Cuando rompa a hervir añade la sal y la pasta rellena. Cuécela el tiempo que indique el paquete, e intenta que en el momento en el que esté hecha, la salsa de mantequilla esté también lista. Mientras el agua para la cocción de la pasta se calienta puedes preparar la salsita de mantequilla de trufa, simplemente pon en una sartén amplia (para que después quepa la pasta) la mantequilla troceada un poco fina y el agua. Añade también las puntas de espárragos verdes limpias y abiertas por la mitad longitudinalmente, y un poco de sal. A medida que la mantequilla trufada se vaya fundiendo, ve haciendo bailar la sartén para que vaya emulsionando, si es necesario ayúdate de unas varillas. Deja evaporar un poco de agua para crear una salsita brillante. Retira los espárragos y reserva. Cuando la pasta rellena esté hecha, procurando que esté en su punto para que no se pase y no se rompa, escúrrela y pásala a la sartén. Con cuidado, dale la vuelta a cada pieza para impregnarla de la mantequilla trufada. **Acabado y presentación** Sirve en los platos los **girasoles de espárragos** (o la pasta que hayas elegido), espolvorea un poco de pimienta y coloca en el centro, de forma armónica las puntas de espárrago. Reparte también las perlas si lo deseas, las de vinagre balsámico contrarrestarán la sensación de grasa en boca de la mantequilla, las de guindilla proporcionarán un sutil toque picante y además, una textura más. Para terminar, adereza con la **salsa de mantequilla** que haya quedado en la sartén. Este plato no espera a nadie, así que a la mesa y ¡buen provecho! **Abreviaturas** c/s = Cuchara sopera c/p = Cuchara de postre c/c = Cuchara de café c/n = Cantidad necesaria

**Ingredientes (4 comensales)** 4 tortillas de trigo 400 gramos de aguja de ternera en dados 3 zanahorias 3 ajos 2 cebollas 1 cebolla morada 125 gramos de champiñones laminados 100 gramos de queso mozzarella salsa de tomate vino de jerez pimienta aceite sal harina pimentón laurel cilantro cayena. **Elaboración** **Dora la carne** Pela y pica las cebollas. Raspa y trocea las zanahorias. Salpimienta la carne, enharínala y dórala en una cazuela con un fondo de aceite caliente. Agrega la cebolla, la zanahoria y los ajos lavados, rehoga 2 min. removiendo y añade 2 hojas de laurel y 1 cucharadita de pimentón. **Añade el vino** Salpimienta y vierte 1 vaso de vino; déjalo evaporar 1 min. y añade otro de agua. Baja el fuego y cuece tapado 1 h. y 20 min., removiendo de vez en cuando y vigilando que no se seque. Retira el laurel y comprueba que la carne esté tierna. Deshiláchala con la ayuda de 2 tenedores. **Saltea los champiñones** Lava, seca y saltea los champiñones en aceite 3 min.; retira y sazona. Unta las tortillas con salsa de tomate, reparte el guiso, la cebolla morada cortada en juliana, los champiñones y el queso rallado. Hornea 5 min. a 220ºC, espolvoréalas con cayena picada y decora con cilantro. **EL TRUCO** Elige una carne gelatinosa y con un poquito de grasa para que al estofarla quede melosa y se desmenuce bien. Tardará más o menos según el tamaño de los trozos. **Ideas para tu tortipizza de ternera estofada** • Puedes hacer el estofado con carne de cerdo, elige un corte meloso, como el cuello, para que quede bien jugoso. • Deja reposar el estofado de un día para otro, se potenciarán los sabores de la carne. • Si lo prefieres, puedes utilizar masa de pizza tradicional para preparar la receta.

Las **Galletas de chocolate** no suelen faltar en ninguna despensa, y con lo fáciles que son de hacer, no hay manos que se resistan a elaborar unas galletas caseras. Recetas de galletas de chocolate hay muchas, hoy vamos con una bien sencilla y que da muy buen resultado. Aunque las hacemos con chocolate negro, se puede sustituir por chocolate con leche si es de vuestro agrado, ya que algunos prefieren un sabor más suave. Con esta base de **galletas** podemos elaborar además un sinfín de variantes, añadiendo distintos ingredientes como cereales, frutos secos, frutas confitadas, etc., puedes disfrutar de un amplio abanico de este alimento que acompaña a nuestra gastronomía desde hace muchos años, aunque no hay duda de que el **chocolate** es un ingrediente estrella que seducirá el paladar. **Ingredientes** 125 gramos de mantequilla 70 gramos de azúcar moscovado 150 gramos de azúcar blanquilla una pizca de sal 5 gramos de esencia de vainilla 300 gramos de harina 175 gramos de chocolate fondant 5 gramos de bicarbonato sódico 2 huevos. **Elaboración** Deja la mantequilla a temperatura ambiente unas horas antes para que esté blandita. A la hora de empezar a **hacer las galletas**, mezcla en un cuenco amplio la mantequilla con el azúcar moreno moscovado y el azúcar blanquilla, añade también la esencia de vainilla y trabaja bien esta mezcla. Tamiza la harina junto al bicarbonato y viértela en el cuenco, añade los huevos batidos y la pizca de sal y vuelve a amasar. Finalmente funde el chocolate al baño maría o en el microondas procurando que no supere los 45-50º C y viértelo sobre la masa de las galletas. Mezcla bien y deja reposar a temperatura ambiente durante una hora aproximadamente. Precalienta el horno a 175º C y empieza a dar forma a las galletas. Haz bolitas del tamaño de una nuez, aplánalas ligeramente y colócalas en una bandeja de horno cubierta con una lámina de teflón u otra tela de cocción, déjales un margen de separación para que no se toquen durante el horneado. Introduce la bandeja en el horno cuando esté a la temperatura y hornea durante 10-15 minutos. Si las dejas diez minutos aproximadamente (todo dependiendo del tamaño de las galletas), mantendrán un corazón crujiente. Si las dejas cinco minutos más tendrás, cuando se enfríen, unas galletas crujientes ideales para mojar en la leche y disfrutar de su textura. Esperamos que os gusten y disfrutéis de esta receta de **galletas de chocolate**, seguro que conquistáis a más de un paladar.

**Ingredientes** 750 gramos de chipirones 4 patatas 1 cebolla 1 pimiento verde italiano 1 pimiento rojo 2 dientes de ajo 2 tomates 200 mililitros de vino blanco 750 mililitros de caldo de pescado 1 cucharadita de orégano 1 hoja de laurel pimentón dulce sal aceite de oliva. **Elaboración** **Corta y trocea** Limpia los chipirones y lávalos. Pela y pica la cebolla y los ajos. Pela, lava y trocea las patatas. Limpia los pimientos, lávalos y córtalos en daditos. **Sofríe las verduras** Sofríe la cebolla, el ajo y los pimientos 5 minutos en una cazuela con 4 cucharadas de aceite. Agrega los tomates lavados y rallados, sazona y cocina 2 minutos, hasta que se haya evaporado el exceso de agua. **Añade los chipirones** Agrega los chipirones, cuécelos un par de minutos removiendo e incorpora el vino, un poco de pimentón, el laurel lavado y el orégano. **Cubre con caldo** Remueve y añade las patatas. Cubre con el caldo y deja cocer 20 minutos, hasta que las patatas estén tiernas. **EL TRUCO** Aunque compres los chipirones frescos, quedan más tiernos si los congelas antes de cocinarlos. **Consejos para una cazuela de chipirones con patatas perfecta** • Los chipirones de mejor calidad son los que se pescan en verano en aguas del Cantábrico y Galicia. Son los denominados de potera y su carne es mucho más fina y de sabor más delicado que los que llegan de aguas del Índico. • Si no es época de buen chipirón, siempre puedes comprarlos congelados. Eso sí, descongélalos en la nevera, a ser posible en la zona menos fría y desde la noche anterior. Si tuvieras que descongelar con rapidez, puedes meterlos en una bolsa de plástico, sellarla bien y pasarlos bajo el agua del grifo, a temperatura ambiente, no con agua caliente, porque pierden propiedades. • Has el corte de las patatas de un tamaño similar al chipirón, que no sean ni mucho más grandes ni daditos pequeños. • Siempre que tengas tiempo sofríe las verduras por separado, la cebolla, el pimiento, etc. Así no se tostarán unos más que otros. • Sigue la norma de oro de guisar con vino: "nunca cocines con un vino que no te beberías", así que nada de echar un vino blanco de tetrabrik a unos estupendos chipirones... Lo mismo sirve para el caldo. Si usas uno envasado, que sea de calidad. Pero si tienes tiempo, prepáralo tú con pescado de roca.