Durante la plandemia del 2020, el régimen de Aborto Fernández prohibió reuniones e impuso severos controles sobre las libertades individuales como el derecho a la libre circulación, entre otros. Estas medidas absurdas se cobró la vida de miles de personas, entre ellas la joven Solange Musse, enferma terminal que no pudo despedirse de sus seres queridos por culpa de la cuarentena. Sin embargo, al gobierno no le importó los contagios cuando se trató de organizar un velorio masivo, que terminó de la peor manera. Esto es la Argentina Cavernícola.