Después de los ataques israelíes en Rafah, Sudáfrica ha presentado una “petición urgente” a la CIJ para investigar este asunto y “usar sus poderes”. El Gobierno sudafricano ha pedido a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que “considere si la decisión anunciada por Israel para extender sus operaciones militares en Rafah, que es el último refugio para los supervivientes en Gaza, requiere que el tribunal use sus poderes para evitar una mayor violación inminente de los derechos de los palestinos en Gaza”, ha informado este martes la Presidencia de Sudáfrica mediante un comunicado. Sudáfrica argumenta que Israel está llevando a cabo un genocidio contra el pueblo palestino en la Franja de Gaza, por lo que presentó una demanda ante la CIJ, la cual emitió un fallo preliminar el mes pasado, instando al régimen de Tel Aviv a hacer todo lo posible para impedir las muertes de palestinos y la destrucción de Gaza. El lunes, el ejército israelí anunció el bombardeo de sectores de la ciudad de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, resultando en la muerte de al menos 100 palestinos y dejando a cientos de personas heridas. Mientras tanto, grupos de derechos humanos e incluso Estados Unidos, el principal aliado de Israel, han advertido que una ofensiva a esta ciudad densamente poblada traerá consigo un desastre. Rafah es una ciudad del sur en la frontera de Gaza y Egipto, donde más de la mitad de la población de la Franja de Gaza huyó tras el inicio de los ataques del régimen sionista. Netanyahu había anunciado previamente su intención de lanzar un ataque terrestre contra Rafah. Rafah, situada en la frontera entre Gaza y Egipto, ha sido testigo de la huida de más de la mitad de la población de la Franja de Gaza desde el inicio de los ataques del régimen sionista. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, había expresado previamente su intención de llevar a cabo un ataque terrestre en esta ciudad palestina.

El nuevo presidente de Argentina, Javier Milei, cumplió el domingo con una de sus promesas de campaña al firmar el primero de sus decretos presidenciales con el que reforma la Ley de Ministerios reduciendo el número de carteras de 22 a 9, a través del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU). El gobierno de Milei se basará en dos megaministerios: Capital Humano, a cargo Sandra Petovello e Infraestructura, con Guillermo Ferraro al frente. Las demás carteras serán Economía (Luis Caputo), Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto (Diana Mondino), Interior (Guillermo Francos), Defensa (Luis Petri), Seguridad (Patricia Bullrich), Justicia (Mariano Cúneo Libarona) y Salud (Mario Russo). De suma importancia es el rol del jefe de Gabinete, cargo que ocupará Nicolás Posse. Por su parte, Santiago Bausili será el presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA); y Osvaldo Giordano, actual ministro de Finanzas de Córdoba, dirigirá la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses). El esquema del nuevo Poder Ejecutivo Nacional lo completan 13 secretarías que trabajarán en los ramos de Educación, Energía, Transporte, Comunicación, Obra Pública, Trabajo y otras. El primero de los megaministeros, el de Capital Humano, será comandado por la periodista Sandra Petovello, y entre sus tareas más importantes estará "asistir al Presidente de la Nación y al Jefe de Gabinete de Ministros, en todo lo concerniente a la educación, a la cultura, a las relaciones y condiciones individuales y colectivas de trabajo". Asimismo intervendrá en temas relacionados al régimen legal de las negociaciones colectivas y de las asociaciones de trabajadores y empleadores; al empleo, la capacitación laboral y a la seguridad social, la inclusión social y el desarrollo humano, así como la seguridad alimentaria, la reducción de la pobreza y el desarrollo de los sectores más vulnerables. El otro megaministerio, el de Infraestructura, abarcará un espacio de trabajo de 62 puntos de funciones. Dirigido por el empresario Guillermo Ferraro, quien forma parte del círculo más cercano al presidente Javier Milei, asistirá al Presidente de la Nación y al Jefe de Gabinete de Ministros, en todo lo concerniente a infraestructura y servicios públicos. Entre sus responsabilidades estarán la elaboración de políticas vinculadas a obras públicas e infraestructura, a la política hídrica nacional, el transporte, la política de desarrollo de viviendas, hábitat e integración urbana; la elaboración y ejecución de las políticas en materia de comunicaciones, unido a obras relacionadas con minería y energía. Para conducir la cartera de Economía Milei eligió a Luis "Toto" Caputo, quien fuera ministro de Finanzas durante el gobierno de Mauricio Macri y su tarea será intervenir en la política económica, presupuestaria e impositiva y de desarrollo productivo; en la administración de las finanzas públicas, la industria, la agricultura, la ganadería y la pesca. Además trazará y supervisará las relaciones económicas, financieras y fiscales con las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), así como la elaboración, propuesta y ejecución de la política nacional en materia de energía, de minería y de comercio. El Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto será ocupado por Diana Mondino, una de las primeras confirmadas apenas ganado el balotaje presidencial el pasado 19 de noviembre. En resumen, su labor será asesorar en las relaciones exteriores, su representación ante los gobiernos extranjeros, la Santa Sede y las entidades internacionales.