Somos lo que comemos, y la comida chatarra no sirve, la comida del hijo de Dios es el Pan de Dios que es Jesucristo, nos mantiene con vida y fortaleza. El es el que da vida
La enfermedad no hace parte de la buena voluntad de Dios, podemos acercarnos a él con fe y obtener el oportuno socorro, la ayuda y nos sana porque nos ama
Cuando recibimos con humildad las instrucciones de Dios las cosas salen bien y somos bendecidos, el problemas es que todo lo debatimos y en últimas desobedecemos.